Burriana: No hay tortugas en el hotel de 5 estrellas y medio millón de euros de Golf Sant Gregori


 

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La Plana al Dia | Burriana | General | 18-10-2019
No hay tortugas en el hotel de 5 estrellas y medio millón de euros de Golf Sant Gregori

El hotel de cinco estrellas que debía acoger la colonia de galápagos de Golf Sant Gregori es, en la actualidad, una zona perdida, llena de hierbas, zarzales, árboles muertos y algunos juncos que han conseguido sobrevivir. Eso en lo que a la vegetación se refiere. 

Por lo que respecta a las tortugas autóctonas, a día de hoy se desconoce su existencia. El edil de urbanismo, Bruno Arnandis, confirmó que "no se han encontrado" a pesar de los esfuerzos del personal de la Politécnica por hallar rastros de su existencia una década después de su introducción. 

La reserva de galápago europeo se enmarcaba dentro del jardín de ribera que protege el Paraje Natural Municipal de El Clot de la Mare de Déu de la urbanización de Golf Sant Gregori, con una extensión, sólo en el margen izquierdo, de 120.000 metros cuadrados.

Se invirtieron alrededor de medio millón de euros en una primera fase con unos 30.000 metros cuadrados de actuación, del total de 70.000 metros cuadrados desti ados para la reserva.
Se llegó a construir los canales y también alguna zona de refugio para las tortugas, así como la introducción de plantas de su hábitat y también se trasladaron ejemplares. 

Pero hasta ahí llegó la actuación y con el paso de los años, la paralización del PAI, el concurso voluntario de acreedores y la reactivación del proyecto urbanísitico, lo que ha ocurrido es que ha desaparecido la colonia que ya debía ser importante en cuanto a número. 

Las hipótesis que se barajan son varias y entre ellas está la de cazadores ilegales que las hayan capturado bien para comerciar con esta especie protegida, bien para comérselas. 

De hecho, en el cercado perimetral, de alrededor de un metro de altura, se observan varios puntos en los que la malla ha sido doblada como consecuencia de la entrada no autorizada en el interior de la zona de protección. 

La vegetación, que si bien sí podía ayudar a que las tortugas se pudiesen esconder, no permite el disfrute del ciudadano ni del naturista de la zona de protección ya que resulta imposible, por ejemplo, ver el agua de los canales de la zona. 
 
Amb la col.laboració de:
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Generalitat Valenciana